viernes, 18 de enero de 2008

Prusia on tour 2008

El próximo 26-27 de junio del 2008 se celebrara en la gran explanada anti-quechua de la céntrica ciudad de Lothar situada al sur-este de Prusia el gran acontecimiento del año: PRUSIA ON TOUR 2008. Por ahora solo podemos adelantar algunas de las actuaciones más bizarras que surgirán de la unión de varios artistas de renombre:

-Unplugged de Calamorro con una balalaika.
-Los Poison & Kiko Poison.
-La niña de la puebla vs Bruce Dickinson.
-Joselito acompañado a la Orquesta Nacional El Puño de Prusia.
-Black gold (con su nuevo batería Herr Finley)

Por ahora no podemos confirman mas grupos, Manténgase al loro molón!

jueves, 17 de enero de 2008

Grandes Héroes prusianos: Hoy, Herr Finlay



Cada nación tiene sus grandes héroes, hombres y mujeres dignos de monumentos y cantos, aquellos sobre los que los abuelos relatan leyendas que atentos escuchan sus nietos, aquellos cuya grandeza y nobleza les hicieron merecedores del respeto y la admiración de sus enemigos; El Rey Arturo, Luke Skywalker, El Cid, Hitler, Juana de Arco o A.C Slater son solo un pequeño ejemplo ilustrativo.

Nuestra nación, cuna de grandes leyendas, guarda con especial orgullo el nombre de su más brillante héroe: Herr Finlay.

Nacido en 1898 en “Das kleine Irland” (La pequeña Irlanda), la más importante colonia irlandesa de Prusia, sufrió desde pequeño el rechazo de la sociedad nativa que ridiculizaba una religión que no entendía: Según el credo de Finlay y los suyos, el verdadero nombre de Jesús había sido Trebor, el cual procedía de la estirpe de los McAlee y había muerto de en el Condado de Wicklow devorado por cabras, la más cruel pena que se imponía a los criminales en dicho lugar.

Tras una caliente adolescencia como granjero de monos, animal que ocupaba por aquel entonces el sitio de la moderna oveja, decidió escuchar la llamada del ejercito prusiano que reclutaba efectivos contra la inminente ofensiva boliviano. De ese modo, arriesgo su vida para defender una tierra que, si bien, nunca le había aceptado, amaba con todo su corazón.

Destinado en la División Antiarea, Herr Finlay sufrió en sus propias carnes durante tres duras semanas los bombardeos de los potentes cazas Bolivianos contra la que nada podían hacer las baterías prusianas. Fue una noche, en la Taberna Jarten & Pretzle, donde, mientras saboreaba la ración diaria de Velero que le asignaba el ejercito comenzó a reflexionar sobre el rechazo que debía soportar día tras día por el hecho de ser diferente. Precisamente esta idea, se convirtió en el germen de su plan, plan que le permitió a Prusia destrozar las fuerzas areas bolivianas. Los enanos prusianos, que al igual que el, sufrían el rechazo y la marginación de toda la sociedad, serían los artífices de la victoria: La munición de las baterías antiareas sería sustituida por enanos atados con misil y un ala delta, que de ese modo, podrían rectificar su trayectoria en pleno vuelo e impactar fácilmente en el objetivo: Morirían, pero su hazaña les haría inmortales.

Aunque horas antes de iniciar el ataque, un alto mando, movido probablemente por su falta de confianza en los enanos, propuso sustituirlos por monos adiestrados,más abundantes y baratos , Herr Finlay, como un auténtico héroe, se opuso a que la más brillante página de la historia de la gente pequeña fuera sustituida por los garabatos de sucios chimpancés.


Dios y la Patria lo tengan en su gloria

El Reverso Tenebroso de Prusia


Hoy en día las personas cuando piensan en Prusia sólo se imaginan un lugar repleto de alegrías, donde todos los días son sábados, y las bodegas están repletas de grandes barriles de como mínimo un buen ron velero 25 años. Lo que no saben es que en una época remota, este entrañable paraíso estuvo dominado por los Sith.

Los Sith encontraron en Prusia el sitio idóneo para hacer lo que mas les gusta: salir los sábados, no estudiar, mandar a paseo las enseñanzas de Samuel L. Jackson, pulular en paños menores después de un duro duelo a navocho láser... en fin, la buena vida.

El momento álgido de este periodo es cuando el mismísimo emperador, con su fiel compañero de aventuras Darh Vader, fueron a la célebre competición de mus (al estilo de Prusia) que se organiza justo después de la semana del psicotrópico. A esta semana solo sobreviven las personas mas puristas, y justo al terminar se organiza un "tablao flamenco" para festejar por su supervivencia.

Por ahora se sabe poco más sobre las costumbres tribales de estos individuos, ya que tras la desaparición de la tercera estrella de la muerte por parte de Jesucristo, esta gran nación fue perdiendo poco a poco importancia y los sith fueron cediendo el poder. Aún así, hoy día todavía se sospecha de algunos altos mandos por tenencia ilícita de sables láser, por lo que la herencia sigue viva...

miércoles, 16 de enero de 2008

Grandes enemigos de Prusia. Hoy: Bolivia


Ilustrémonos hoy con este extracto del libro de Tom McNamara “Prusia sin tapujos” (publicado en España por Panini), una de sus obras menores aunque no por ello menos recomendable:

“Entre los grandes enemigos con los que contó Prusia durante su excitante y longeva historia, uno de ellos destaca por su valentía frente a lo que era de forma obvia el Mayor Imperio de Todos los Tiempos. Esta fuerza opositora, como muchos sabrán, era Bolivia. Antes de ser cuna de rostros tristes, instrumentos de viento de bajo copete y discusiones en el seno de la FIFA sobre a que altura máxima deben jugarse los partidos; Bolivia fue llamada “el titán de Los Andes” por su poderío tecnológico y militar. Los bolivianos ya disfrutaban de los placeres de Internet por aquel tiempo (siendo Kazaa Lite el cliente P2P estrella), y el GPS campaba a sus anchas por las carreteras de Sucre, llamada así en honor al famoso jugador croata.

El punto clave a nivel militar de la nación eran sus aviones de combate, con la famosa “Armada Quechua”, una potente flota de mas de 300 cazas F-35 que haría las delicias del pueblo boliviano en las campañas por la conquista de Norteamérica y Nueva Zelanda, campañas que, como se explica en mi primer libro “La historia en tomo y medio” fueron coser y cantar. El por aquel entonces virrey de La Paz, Tomaloc Nunchaccu se planteó, después de la ocupación completa del territorio kiwi, atacar a la potencia por excelencia y motivo de esta obra que tienes entre manos, la gran Prusia.

Las crónicas de la época hablan: El pueblo prusiano se echo en pleno a la calle, a celebrar el ataque inminente de una flota que, aunque derrotada de antemano, suponía un cierto reto para los prusianos. El gentío se apoderó de Kopetenplatz, la sidra barata mojaba las calles, jolgorio general, abundantes opiáceos. Precisamente de ese momento histórico proviene uno de los clásicos dichos populares del país: “Si llegan los bolivianos, vente a la plaza, surmano”.

Fue un informador en Viena, nombre en codigo Thor, el que dio las noticias de la aproximación de los cazas bolivianos a la frontera con Austria. Los Prusianos cargaron sus antiaéreos y se prepararon para la masacre.

Según los historiadores de la época, mas de 200 aviones tuvieron que caer antes de que el general general Tomaloc diera la orden de retirada. La division antiaérea había hecho estragos con dos tercios de su flota.

Curiosamente, el acero de estos cazas que quedaron en suelo Prusiano sería usado mas adelante para la construcción del mayor Parque acuático de Europa, "Wasser Sherrich", que haría las delicias de los infantes de la época, adictos a sus famosas pistas blandas. Fotografías de la aquel tiempo muestran como el buen humor y la ironía prusiana les llevo a usar como emblema del parque la propia bandera boliviana.

Pero, ¿qué ocurrió con los cien aviones restantes? Lejos de amilanarse por la derrota, se dirigieron a Nápoles (Italia era aliado de Bolivia por aquel entonces) para el necesario repostaje; y pusieron rumbo a los paises nórdicos, donde continuaron su sangrienta campaña de conquista hasta caer a manos de Finlandia en lo que se denominó popularmente como "La extraña batalla"

Pero eso ya es otra historia..."

viernes, 11 de enero de 2008

Historias de un soldado prusiano (segunda entrega)

... pero los tiempos de las trifulcas habían terminado, Struchem, que indudablemente había sido férreo defensor del patriotismo Prusiano Sureño, se vió obligado a inmiscuirse en una gerra que en el fondo ni le iva ni le venía.Ahora deambulaba solo por una carretera de tierra que en aquel momento se había convertido en lugar de paso para tanques y escuadrones. Tras varias horas d caminata sus ojos se iluminaron al ver que sus plegarias habían sido escuchadas, en ese momento creyó que Dios existía; pero luego se acordo de la época en la que jesuscristo estuvo trapicheando en su país y esa idea se la quitó de la cabeza; a pocos metro un cartel luminoso mostraba las letras que provocaron el jolgorio en el alma pícara del soldado: CLUB.
Los parroquianos de aquella sala en aquel momento eran de lo mas dispar; allí estaban entre otros, para sorpresa de Struchem, el obispo gangoso que la noche anterior bendijo a su compañía, antes de su deserción; El conde Hungsteienlreichenaft, un respetado aristócrata obsesionado con el sado que casualmente fué quien asesino a Westrun, compañero de de aventuras del soldado; Lichonhorft, general de artillería que gastaba un bigote alargado que le llegaba hasta los hombros, y un perro con monóculo que curiosamente Struchem recordaba haber visto actuar en una obra de teatro clásico sobre unos galeses en el caribe. Jugaban a las cartas, fumaban puros, bebían en el mejor ron, que les traía una señorita vestida al gusto del obispo; de niñera con sombrero de copa y máscara de cuero, y apostaban fuerte.
Struchem se les acercó decidido.
- ¿puedo unirme a la timba?
- mge sgfuena tbu cgara - respondió el obispo con extrañeza - ¿Tbu hasb lgunchadbdo en la combagnia gutro bel ofgtabo gbatallón?
Struchem contuvo la risa.- ¡carajo! ¿puedo jugar o no?
- Wooof - dijo el perro con decisión.
pero la cara de sorpresa de Struchem dio a entender que no entendía su idioma.
- Dice que el es la banca - contestó la voz ronca del conde Hungsteienlreichenaft - que cuanto pides en fichas.

jueves, 10 de enero de 2008

Historia prusiana moderna: Tiempos oscuros


No por ser magna, Prusia es inmune, pues hasta el más refinado oro puede perder su brillo cuando un sucio chimpancé lo introduce en su ojete. Así, al igual que el ano de ese mono, el antisemitismo nazi es el más oscuro agujero de la historia prusiana. Pero, ¿Cómo consiguió Hitler hacer crecer un odio tan exacerbado en los corazones prusianos siendo, como son éstos, tan puros y virtuosos? No vamos a hablar aquí de los manidos motivos que siempren utilizan los historiadores, sino de uno que, no por menos conocido, resultó ser menos determinante.

Ocurrió que en el año 1875, Jesucristo, en su tercer advenimiento vino a parar con su fiel discipulo, el ingles Lord Peter (pronunciesé Pita) a tierras prusianas para divulgar la palabra de su Padre. Como todavía no había alcanzado la treintena, fecha para la que preveía que tenía que volver a ser crucificado, era todopoderoso y además, gracias a las virtudes de la ya inventada imprenta y a la experiencia que daban dos advenimientos previos, la labor evangelizadora iba sobre ruedas, decidió probar suerte como monarca prusiano.

Durante su corto reinado, tan solo duro ocho meses, Prusia alcanzo cotas de desarrollo y caliche nunca vistos en su historia, convirtiendose en el más importante y moderno de los estados europeos. Así, Lord Piter como primer ministro, llevo a cabo importantes reformas en todos los ambito sociales y firmó un importante convenio con el Duque del Milanesado, Giussepe La Verga, por el cual Milán se comprometía a compatibilizar la avanzada tecnología de sus gomas nata con las minas de los lapices Staedler. Por su parte, Jesucristo, consiguió disparar en todo Europa las ventas de Ron Velero y pretzels , los más elementales alimentos prusianos, gracias a la firme promesa de que serían estos los alimentos que consumiría en su última cena.

La pronta abdicación de Jesucristo vino motivada por la actitud de la banca prusiana, de la que nunca pudo obtener la financiación que necesitaba, bloqueandose de este modo todo su programa de reformas (incluyendo un proyecto, Operación San Pedro, en el que el ganador obtendría el honor de convertirse en su discipulo). La banca, dominada por las familas prusianas judias, demostrando una impecable coherencia, nunca se reunió con el nuevo monarca, alegando que les era imposible entablar una cita con alguien del que tenían la certeza absoluta de que no existía.

Tras varios intentos fallidos de Jesucristo por acercar las posturas y dos muertes con sus respectivas resurreciones de Lord Piter (se dio con la cabeza en la bañera y recibió una colleja de Jesús); la dupla sagrada abandonó nuestra tierra y encamino sus pasos hacia España, donde vivieron eróticas y emocionantes aventuras, pero eso ya es otra historia.

sábado, 5 de enero de 2008

Historias de un soldado prusiano...

El obispo de Masachuset les dió la bendición antes de saltar a la batalla. Todos los componentes del regimiento aguantaban la risa mientra aquel gangoso hablaba en latín gesticulando cruces con las manos hacia las filas de hombres firmes con fusiles. Atrás del todo, en las últimas columnas de combatientes, un pequeño grupo de insolentes se pasaban la botella de Velero. Struchem no podia aguantar el morazo.
media hora mas tarde se quedaría durmiendo la mona en trincheras mientras el resto disparaban al bando enemigo. Eso fué antes de que callera prisionero, despues de aqullo, juró (aunque luego no cumplió) que jamás volveria a probar el ron.
Al despertar de la soba estaba solo entre cadáveres y heridos de bala. Uno de sus compañeros, que quedó rezagado al borde de la muerte le suplció que le alludara. Pero a Stuchem le caía mal, así que le dejó allí agonizando después de robarle las botas y la munición.
Tenía algo de resaca y estaba harto de esa guerra. No le apetecía luchar, solo quería llenar su garganta con alcohol e irse a putas; la única lucha que de verdad le gustaba eran las trifulcas tabernarias que se montaban en Prusia en los viejos tiempos. Ahora solo les quedaba mucho tiroteo y poco combate cuerpo a cuerpo, y estaba cansado de eso. Asi que decidió desertar, "se acabó el no usar las manos en combate", se dijo; acto seguidó echó a andar en la dirección que sus pasos resacosos guiaban.

El tiempo de las trifulcas:
Hubo un tiempo en el que prusia estaba plagada de truhanes y malechores. La época en que la picaresca reinaba en las ciudades fué la misma en la que las disputas entre Prusia Norte y Prusia Sur estaban en su punto álgido. Por aquel entonces Struchem viajaba de un lado para otro saqueando lo que encontraba con Westrum, su compañero de correrías. Era el tiempo en que la cotización del Velero subió y los precios se dispararon, la peor parte de ese momento historico. Fue entonces cuando su valor superó al del oro; afortunado era quel que poseía una gota del delicioso y delicado licor.
(CONTINUARA)

martes, 1 de enero de 2008

Decisiones...

Sí, esas mismas que te hacen seguir un camino u otro, esas que te ponen en un dilema, una encrucijada la cual tú sólo puedes solucionar...Hay gente que te aconseja, que te advierte pero como he mencionado solamente tú puedes elegir.
Una vez elegida simplemente no te lo cuestiones, nada de: pudo haber sido... o dejó de ser...unicamente queda aquello por lo que obstaste.
¿Fue para bien o no?Sólo el tiempo lo dirá...